UNA NUEVA CRISIS POLÍTICA EN CIERNES

Todo parece indicar que el miércoles el cupón BONAR X, que fue emitido en dólares pero bajo legislación local, se pagará en dólares. Cabe recordar que el BONAR X es un bono emitido por el Estado Nacional.

De ésta manera se pone en evidencia que el Estado nacional envía a las provincias menos favorecidas, que emiten deuda en dólares bajo legislación argentina con la intención de financiar sus déficit de caja para el pago de salarios y gastos corrientes, un mensaje claro: los bonos provinciales serán considerados "bonos basura" y para aquellas que muestren esas fallas de caja les será más conveniente negociar con la instancia federal que emitir esos bonos.

Queda consolidada así la versión unitaria más dura y cerrada en contra del federalismo, el sometimiento de las provincias, no pampeanas, al gobierno central.

En tanto las provincias pampeanas y ligadas, como lo hemos señalado en diversas oportunidades al mercado mundial y que disponen de acumulación propia de dólares, adquieren grados de libertad diferenciales.

Así queda sellada la "organización nacional" tal como lo señalamos al analizar la cuestión de "La Salada" ( http://www.henrykgrossman.blogspot.com.ar/2012/08/la-salada-un-dilema-shakespereano_31.html ) "La aparición al interior de la Argentina de zonas especializadas (por ejemplo, aquellas directamente ligadas al mercado mundial, diferenciadas de aquellas con escaso o nulo acceso) y de cada vez más profundas desigualdades regionales son indicadores de una crisis económica que avanza sobre el diseño mismo del proyecto de Nación y que no termina de reconocerse.

¿No será acaso el momento de comprender que el abandono del federalismo está profundizando los estragos de esa crisis económica y la necesidad de reconstruir un Estado Nacional Federal para lo cual se hace tan necesaria una nueva Ley de Coparticipación Federal como el diseño de una estrategia de desarrollo industrial y productivo que implique un mapa de necesarias promociones industriales y productivas más eficientes y sustentables?"

Esta fragmentación de la Nación, ésta paradojal política de exclusión política, económica y social ejecutada (no verbalizada) por quienes detentan el Gobierno Nacional es congruente con la política de "tensión permanente" con los sectores medios de la sociedad de modo tal de hacerlos responsables de tal estado de cosas.

De éste modo se pretenden presentar ante la sociedad como el "escudo protector" frente a la voracidad de los sectores medios, en particular, pampeanos que, apropiándose de la renta agrícola conforman un proyecto excluyente.

Este grado de perversión política es absolutamente novedoso en la historia argentina, que ha vivido capítulos trágicos en la lucha por el federalismo. Pero como toda perversión, termina con dolor, debemos prepararnos para ese crucial momento en el cual la cara oculta emerja y muestre su verdadera y llana monstruosidad: el verdadero y único proyecto existente es el de permanecer eternamente en el poder.

La percepción de ésta perversión por parte del conjunto la sociedad da paso a un fenómeno bien estudiado de organización política: el surgimiento de los particularismos, de la parte sobre el todo.

Así, es más importante el desquicio del gobierno municipal o local que las graves anomalías provinciales y éstas son mucho más importantes que las cuestiones nacionales.

Cuando éstas percepciones se materializan, la crisis ya no es ni económica ni social, como señala Habermas, la crisis adquiere la dimensión de política y la entropía del sistema comienza a manifestarse como extremadamente peligrosa.

Para sostener la “pax política” se requiere mantener narcotizada por el feroz consumo al conjunto de la sociedad para lo cual se emite moneda de un modo desmesurado y cuyo único valor es transaccional mientras, el Gobierno Nacional, habido de dólares, produce todo tipo de desquicios, formales e informales, en la organización económica.

Los dislates han generado caída de la inversión, pérdida de rentabilidad y obviamente, una menor dinámica de la acumulación de capital.

Bajo éstas condiciones: prevalencia de la parte sobre el todo y pérdida de dinámica económica, el futuro no parece nada promisorio y lentamente la sustentabilidad del empleo y de las PYME se irá debilitando hasta el punto de profundizar aún más la marginalidad (como le hemos señalado en nuestras opiniones sobre el formato “La Salada” ya citado o en http://www.henrykgrossman.blogspot.com.ar/2012/07/nuevamente-el-ajuste-lo-pagan-los.html ).