miércoles, 21 de marzo de 2012

¿Cuán lejos estamos de una Reichskristallnacht?

Mientras la endogamia se acentúa en el Gobierno de Cristina Fernandez, los operadores oficiales salen a dividir a las organizaciones sociales representativas de los intereses sectoriales de la sociedad. 

Así, mientras busca dividir a los representantes de los trabajadores interviniendo de modo explicito en su proceso electoral a través no sólo de intentar tener candidato propio (Miguel Calo de la UOM) sino mostrándose al lado de sus aliados (tal el caso de la asunción del Secretario general del SMATA).

La división que se promueve pretende desviar la alta conflictividad social que ya más que una amenaza comienza a cristalizarse en cortes, piquetes y marchas con reclamos de todo tipo.

Lejos de contribuir al diálogo con otras expresiones políticas, sistemáticamente a descalificado a la oposición negándole su rol, cooptando a sus dirigentes de la más diversas formas y evitando por todos los medios que ocupe los lugares que le corresponden en el entramado democrático ( la intromisión del Gobierno en la designación del Auditor General es un claro ejemplo) 

En las organizaciones sociales de base, también ha contribuye a la segmentación mediante la distribución de beneficios asimétricos, por ejemplo los del Plan Argentina Trabaja al cual le ha otorgado incrementos de carácter selectivo que serán distribuidos conforme la cercanía o lejanía del calor oficial de los punteros y líderes sociales. 

En el lado empresario, ha puesto proa a la Unión Industrial Argentina a la que de modo explicito pretende quebrar abandonando el aparente buen diálogo que tenía con su Presidente (Ignacio De Mendiguren) al que no sólo no convoca sino que inserta en esa Institución que representa los intereses de las grandes compañías nacionales o extranjeras conflictos que obligan a debates sobre intereses que promueven la división. 

La misma división promueve entre las Entidades que representan a la producción agropecuaria. Una y otra vez ha tratado, y en cierto sentido lo ha logrado, imponer discrepancias intra sectoriales menores cuando se acercaban acuerdos estratégicos de mayor relevancia. 

No se agotan allí las intenciones de dividir. 

Ahora le toca a las representaciones de las Pequeñas y Medianas Empresas. 

Ya hemos señalado en otras oportunidades que son éstas las que contribuyen a la estabilidad democrática toda vez que media entre los grandes intereses de los grandes grupos económicos y la política pública cuando ésta pretende el desarrollo con inclusión social. 

Las PYME generan la contra tendencia necesaria para evitar que la concentración económica avasalle los intereses del conjunto de la comunidad. 

Bien, a ella le ha llegado la hora. Y con apoyo oficial se azuza una pelea cargada de afrentas personales referidas a un pasado sobre el que nadie ha hecho auto crítica. 

Esos enfrentamientos son funcionales a un gobierno que nada ha hecho por las PYME, que por más que exhiba un Secretario especializado éste se ha limitado a distribuir algunos subsidios sin mayor impacto y no a intervenir en el diseño de una política de fortalecimiento y desarrollo de las PYME, en los hechos, el objeto de su existencia. 

La política de segmentación social y enfrentamiento continua con los artistas, los intelectuales, los maestros, el deporte y toda otra actividad de la comunidad. 

Esa política deliberada de fragmentación social tiene un único objetivo: sostenerse en el poder evitando que las mayorías se recompongan y resuelvan orientar el proyecto nacional hacia otros objetivos y con otros dirigentes. 

Simultáneamente, toda crítica es considerada una traición insoportable que de una u otra forma será castigada haciendo uso de los resortes del poder gubernamental. A´sí quienes discrepen en público serán visitados por la AFIP u otra agencia estatal y serán puestos en la lista de las tareas de vigilancia e inteligencia de la SIDE o el Proyecto X. 

Los amanuenses, en pago de sus cobardías, tampoco reciben el mejor trato. Esta política, como señalamos al principio, promotora de la endogamia, no admite nuevos actores ni protagonistas. 

Por otro lado, los "elegidos"· pueden cometer todo tipo de tropelías y corruptelas. El favor oficial, que se ha derramado sobre los jueces, los hace a éstos benévolos y dispuestos a utilizar la biblioteca en favor de la impunidad. 

Así, divida la sociedad, amedrentados sus dirigentes, ya sean empresarios, trabajadores o líderes sociales, la posibilidad de una elección en el 2013 que les garantice la mayoría especial que se requiere para modificar la Constitución y habilitar la continuidad de Cristina Fernandez resulta a todas luces su anhelo. 

Para ello operan personajes como Mariotto en la Provincia de Buenos Aires, que co el apoyo explicito de la Ministro de Seguridad Nilda Garré apunta a controlar el territorio del GBA desarrollando alianzas con punteros cuya moneda de cambio es la impunidad en sus "negocios callejeros" (drogas, juego, prostitución, etc). 

Bajo éstas condiciones, puede seriamente esperarse que quienes detentan los recursos que necesitamos para profundizar nuestro desarrollo económico se arrimen a éstas playas. 

El autoritarismo instalado puede devenir en las tentaciones fascistas que anidan en muchos de quienes forman parte del "nucleo íntimo" del poder. 

Algunas expresiones ya son visibles y como nos preguntamos hace ya un tiempo, ¿cuán lejos estamos de una Reichskristallnacht (Noche de los Cristales Rotos)?


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